Poesie di Ana Emilia Lahitte- poetessa argentina

Biblioteca DEA SABINA-

Ana Emilia Lahitte
Ana Emilia Lahitte

Poesie di Ana Emilia Lahitte– poetessa argentina.

 

DESERTI

Gli uomini blu
costeggiano le alte dune.

Non parlano di sete
con chi non la conosce.

Come cibo
condividono silenzi di sabbia.

Sembra che ci separino eterni
orizzonti.

Non sanno
che in loro vive un’altra sete.
Esangue
senza oasi.

Quella dei nostri deserti.

(da La notte e altre poesie, 1960)

.

.

DOLCEZZA

Com’è ardua… com’è serena
questa tristezza
di essere finalmente sola
con l’ombra.

O già senza di essa.

(da Legno e trasparenza, 1962)

 

Di Ana Emilia Lahitte sul Canto delle Sirene:

Ana Emilia Lahitte
Ana Emilia Lahitte

 

 

EL SUETER DE FEDORIO

En los bordes raídos del suéter
de Fedorio
se arremansa la vida y sus historias.

Jamás
me atrevería a proponerle restañar
esos hilos desgastados
reavivar los colores
las zonas percudidas como un abecedario
para ciegos.

Quitárselo
sería desollarlo.

El suéter de Fedorio
es una hogaza
un libro de bitácora    un sol    un campanario
alguna melodía que se canta
sin que nadie la escuche.
Su intemperie
anuda cuanto ha sido algo más
que un adiós
menos que un llanto
algo que sólo cabe en el hueco secreto
de la mano.

Si otra piel respira
debajo de mandala de su suéter gastado
será sólo un sudario
que busca convertirse en el revés cereal
de esa coraza
hilada por los pájaros.Ana Emilia Lahitte

ATRAPADOS

Sólo tengo de vos
una fotografía con pómulos rasantes
tu pelo de llanura sobre los hombros tensos
y sin brazos
-no he podido inventarlos todavía-
y tu extraña manera
de acompañarme a solas
de este lado del mar.

Vivías en París
(lo especifica el dorso de la fotografía)
ignoro si habrás muerto.
Importa
el desamparo de tu mirada inmensa
que me atraviesa
y sigue camino a mis espaldas
sin dejarme jamás.

Mirás hacia el vacío.
Un abrazo
sin tiempo que se abraza a sí mismo.
Mirás
como buscando la huella de un albatros.
Algo que implora
un límite para poder llegar.

///

Ni siquiera conozco tu sombra.
Sin embargo
regreso sin descanso
y me tiendo a tu lado en tu voz
en tu sed
en el tacto insaciable
con que rastreo a ciegas tus rasgos
con mis dedos.
Y te llevo a mi piel.
Y siento que tus muslos
aprietan con el celo de lo deshabitado.

Gozamos
el secreto pacto
de lejanías
que anuda nuestros cuerpos
en una memorable batalla despojada
de heridas y arrogancias.

Una trama ilesa
bellamente perversa insiste en atraparnos.
Y estamos atrapados
aquí
en el Sur más sur.
En esta factoría de la imaginación oculta
en el reverso
de los acantilados.

Ana Emilia Lahitte
Ana Emilia Lahitte

 

LOS CHICOS DE LA CALLE


Oh, niños asesinos, oh salvajes antorchas.
Julio Cortázar

Ragazzi di vita
los llamó Pasolini
con su piedad adversa
desollada.

Y nos los deja así
sin otra identidad que la mugre
y la llaga.

Debajo
del abrigo de su costra de escaras
-cristos breves-
los chicos de la calle
no saben todavía que su sombra atrapada
crece
para la historia de la infamia.*

El dolor
nunca es niño.
Y en ellos ni siquiera es dolor.

Es una humillación
de la esperanza.

* Borges

 

 

T I G R E S

Dicen
que el territorio de las hembras
es menor.

Pero el olor a hembra atraviesa el verano
y el celo
es territorio prometido
para tigres
y albatros.

 

 

 

DESIERTOS

Los hombres azules
frontera de las altas dunas.

No hablan de la sed
con quien la desconoce.

Como alimento
intercambian silencios de arena.

Parecen separarnos horizontes
eternos.

Ignoran
que con ellos convive otra sed.
Exhausta
Sin oasis.

La de nuestros desiertos.

Ana Emilia Lahitte
Ana Emilia Lahitte

 

LIBERACIÓN

Las manos.
Sometida extremadura
de la avidez y de la servidumbre.

Si pudiera
las dejaría partir
desarraigadas
sabiamente inexpertas
como el tacto feliz de los amantes
buscándose en la oscuridad.

 

 

 

SELLOS DE POSESIÓN

 

CUERPO DE MUJER

Conspiración del universo
para que el horizonte
se desnude.

 

QUASAR

Aquel falo de estrellas
que siempre pareció comenzar
en tu boca.

 

PECADOS

Hay pecados rebeldes
que no desaparecen hasta violar
alguna garza azul.

Ana Emilia Lahitte
Ana Emilia Lahitte

 

 

Ana Emilia Lahitte, poetessa argentina, nasceva il 19 dicembre di cento anni fa. Esordì a vent’anni con i poeti della “Generazione degli Anni ’40” differenziandosi subito per il tema della morte nel suo significato universale: “Il polso arduo della bellezza ferita, la sua denuncia testimoniale, la sua universalità a terra. Il passaggio fu arduo, ma il clamore del suo significato era chiarissimo” disse in un’intervista. Il suo stile con gli anni va condensandosi, si fa più nudo, con il minimo di parole si contrappone all’abuso del discorso perpetuato dai mezzi di comunicazione nel tentativo di “sintetizzare la chiarezza esistenziale del complesso che l’uomo di oggi comporta, senza spogliarsi della radice ancestrale che lo sostiene”.

Ana Emilia Lahitte (La Plata, 19 dicembre 1921 – 10 luglio 2013), poetessa e scrittrice argentina. Ha pubblicato 27 libri suddivisi tra poesia, narrativa, teatro e saggi. Ha collaborato con diversi ministeri alla diffusione della poesia argentina nel mondo.

Ana Emilia Lahitte (La Plata, Argentina, 19 de diciembre de 1921 – Íd., 10 de julio de 2013). Poeta, novelista, dramaturga y periodista. Lic. en Psicología. Fue directora del Centro de Documentación e Información Pedagógica del Ministerio de Educación de la Provincia de Buenos Aires; Asesora literaria de Radio Universidad Nacional de La Plata; Secretaria técnica del Departamento de Teatro de la Escuela Superior de Bellas Artes; jurado de premios provinciales, nacionales y extranjeros.

Lahitte publicó 24 libros (poesía, narrativa, ensayo ,teatro y periodismo).

Algunas de sus obras publicadas son : 
Sueño sin eco (1947), El muro de cristal (1952), La noche y otros poemas (1959), Madero y transparencia (1962), Al sur de marzo (1969), Los abismos (1979), Los dioses oscuros (1980), El tiempo, ese desierto demasiado extendido (1993), Insurrecciones (2000),Summa de poemas, 1947-1997 (antología, 2001), 
Memorias del Adiós (2004), Los abismos, El cuerpoCielos y otros tiempos, Sueños sin ecosLos dioses oscurosEl padre muere (2006), Gironsiglos (2006). 

Es importante destacar entre sus ensayos y compilaciones poéticas: Veinte poetas platenses contemporáneos (1962), María de Villarino (1966), Roberto Themis Speroni (1975),
Cinco poetas capitales (Ballina, Castillo, Mux, Oteriño y Preler, 1995).

Obtuvo, numerosas distinciones, algunas de las cuales son: Pluma de Plata del PEN Club Internacional, Centro Argentino (1980), Puma de Oro de la Fundación Argentina para la Poesía (1982 y 2001), Primer Premio Nacional de Poesía, Región Buenos Aires (1983), Premio Konex (1994), Premio de Poesía “Esteban Etcheverría”, de Gente de Letras (1999), Premio Página de Oro y Letras de Oro de Honorarte.

Su obra ha sido incluida en diversas antologías y traducida al inglés, francés, alemán, italiano, catalán y portugués. Forma parte del Inventario de Poetas en Lengua Española -segunda mitad del siglo XX- trabajo de investigación realizado conjuntamente por la Universidad Autónoma de Madrid con la Asociación Prometeo de Poesía, de España y tambien  ha sido incluida en el Breve Diccionario Biográfico de Autores Argentinos -desde 1940- realizado por Silvana Castro y Pedro Orgambide, Ed. Atril, 1999.

En 2001, la Municipalidad de La Plata la designó Ciudadana Ilustre.